La finca está situada en Dogliani en el corazón de las Langhe suroeste, una extensión de colinas de rara belleza, las “crestas”, denominadas en dialecto piamontés “langhe” Una tierra extraordinaria, hecha de panoramas abiertos, de quintas de colinas ordenadas dibujadas por las geometrías perfectas de los nobles viñedos. Un itinerario en estas tierras, sigue el cambio de las estaciones desde el hundimiento hasta el despojo de los viñedos, entre los castillos que salpican las alturas y no tiene destinos precisos, sino que es más bien un recorrido amplio y libre a lo largo de una densa red de carreteras que siguen las crestas de las colinas y las cuencas: es un “ir por Langa”

La estructura consta de 36 habitaciones ubicadas en un edificio reconstruido donde originalmente se encontraba, desde 1600, una antigua finca agrícola dirigida por una histórica familia Doglianese que cultivaba los terrenos de trigo y viñedos y que hace más de 100 años importó de América y plantó las dos grandes secuoyas que dominan el parque. La reconstrucción se realizó en piedra local, recuperada de los edificios antiguos. Dentro de la finca, el restaurante ofrece todas las especialidades gastronómicas del territorio, aprovechando al máximo la riqueza de las materias primas disponibles, una para todas, el famoso Dolcetto di Dogliani.

Las piscinas, las salas interiores y exteriores para banquetes y el hermoso parque hacen de la finca un lugar privilegiado para eventos y bodas.